Bienvenidos~

A través de las esporádicas palabras escritas aquí trato de explicar pequeños retazos de vida. No es nada fuera de este mundo. La simplicidad es algo que siempre tengo presente. Mis entradas son libres de comentar al público en general.
También se que mis escritos no puedan llegar a ser del agrado de muchos puesto a mi escaza (o casi desinteresada) habilidad de escritura, pero daré lo mejor de mi en este gran camino.
Sin nada más relevante que agregar: ¡BIENVENIDOS!

jueves, 5 de abril de 2012

Perdido en Sepia. XIV Intuición




Me fui a cama
donde descansaba...
y mi cabeza agachaba,
y mi corazón empezar lloraba.

Recostado vi hacia el tumbado.
Empecé a leer papeles pegados,
cada uno de temas diferentes,
inclusive de fechas no existentes.

En mi cuarto habíase un pilar

con varios escritos en su lugar;
cerrando mis ojos no entendía ya

algo que de pronto empezó a brillar.


"Si tu aventurarte querer ya

trasfigura una posible salida
y poder planear intrépida huida.
Cada paso. Cada día "

Vi mi cercana ventana;
llena de grandes y viejos árboles.
Por debajo, punzantes matorrales, 
hacían mi salida muy distante.


Aún teniendo un bonito jardín:
Era distante de mí;
nunca lo sentí

y un poco le temí.

Y cuando empezaba yo a gemir
vi un destello en el suelo
de una llave a resurgir,
cual lindo color de ciruelo.


Mi satisfacción.
Querella en fricción.


Aquella deducción:
Intuición.

Perdido en Sepia. XIII Fortaleza






Entré.
Analicé.
Recapacité.
De pie.

Estaba entonces en el almuerzo
cuando seguía en mi búsqueda.
Otra vez, no ponía mucho esfuerzo,
todo estaba "casi hecho".

Y debajo del mantel

hallé otro pedazo de papel:
"Fuerza extrema guardas,
y tu braveza interna" decía en él.

Palabras carente de sintaxis hallé
hasta que debajo de mi maravillé
con algo que no podía creer.

Era mi vieja grabadora añil,
aquella colorida e infantil.
Dentro de ella un disco brillante...
y su música...¡Demasiado fascinante!

Heme, entonces, deleitándome
suavemente con la música.
Cada vez, cada acústica
hacíame acariciarme.

Lleno de sutiles notas
sentí que debí tener esa
fuerza. Más allá de mis lindas botas.
Así, debí armarme de: Fortaleza